El pasado miércoles 30 de diciembre, los miembros del equipo Spirit recibimos una sorpresa al llegar al laboratorio.
Misteriosamente no nos dejaban salir de ahí una vez entrabamos. Al poco tiempo de llegar, el misterio fue desvelado: se trataba de una gimkana. Según una carta que recibimos (tanto nuestros compañeros de Curiosity como nosotros) el robot había sido secuestrado y para hallarlo se debían pasar 9 pruebas por todo el colegio, por supuesto trabajando en equipo. Tras completar la gimkana, regresamos al taller y entonces nos dijeron que para recuperar nuestro preciado robot, debíamos pasar la última prueba...... la décima. Todas ellas consistían en buscar lugares y hacer juegos en equipo y, definitivamente, construir un vehículo con todo lo que habíamos recopilado en las anteriores misiones.
Por otra parte, como no, tuvimos una merendola ya que como nos enseñaron nuestros mentores "sin alimentación, no hay producción".
Y al fin nos pusimos a trabajar, fue el día más productivo de todos para el proyecto técnico: finiquitamos el segundo robot, definimos la estrategia en la mesa y, lo más importante, un programa en el que llevábamos trabajando dos semanas dio sus frutos.
En el proyecto científico también hemos avanzado mucho, somos capaces de derretir pinturas plastidecor y darles la forma que queramos. También acabamos la bandera del equipo y el póster sigue su proceso.
Sin lugar a dudas fue un gran día y nos lo pasamos muy bien, estamos formando un buen equipo y, como dice nuestro lema:
¡TODOS SOMOS UNO!
Ander Otero